Empieza a delegar cuando todavía eres joven
Delegar es la clave esencial para que, cuando llegues al otoño de tu vida, no te tengas que arrepentir de nada como me paso a mi, al haberme perdido la infancia de mis hijos por no saber delegar a tiempo.
Este es un tema que ya he tratado en dos artículos anteriores:
“Delegar o seguir siendo esclavo de tu propio negocio” con miles de visualizaciones y “Delegar, el secreto de los grandes empresarios” donde te explico las claves de la delegación.
Hoy quiero tratar el arte de delegar, como una reflexión que nos deberíamos hacer cuando todavía no hemos llegado al otoño de nuestras vidas.
Te lo explico en el vídeo de esta semana:
Y aquí te dejo la transcripción por si lo prefieres leer:
Actualmente estoy dando un curso a un grupo de jóvenes empresarios sobre “Gestión Empresarial para trabajadores Autónomos”.
El más viejo del grupo tiene unos 42 años.
Algunos están en el curso porque trabajan por cuenta ajena y se quieren hacer Autónomos.
Otros porque llevan muchos años como autónomos y empiezan a estar cansados de trabajar tantísimas horas.
Y un par de ellos porque quieren hacer crecer su empresa y no saben cómo hacerlo.
Trabajar demasiado
Cuando eres un excelente profesional, te gusta tu trabajo y tienes tu propia empresa, te dedicas en cuerpo y alma, como hacen ellos ahora mismo.
Trabajas infinidad de horas porque el negocio así lo requiere y sacrificas, si hace falta, vacaciones, eventos en la vida de tus hijos, encuentros con tus amigos.
Ya conocéis el dicho: “El negocio es lo primero, es lo que nos da de comer”.
El otoño de la vida
Teniendo en cuenta que la esperanza de vida en España en 2014 era de 80,1 años para hombres y 85,6 para mujeres (Según Datos del Instituto Nacional de Estadística).
Si ponemos de media 80 años. El otoño de nuestras vidas estaría entre los 40 y los 60 años.
El despertar
Pasan los años y llega un momento, normalmente cuando llegas a esta etapa de tu vida, en que te planteas si merece la pena sacrificar tantas pequeñas cosas por tu negocio.
Por mucho que te guste tu trabajo, esas pequeñas cosas que te suceden día a día son las que hacen que merezca la pena vivir.
Todos esos años, todas esas vivencias, todos esos pequeños momentos, ya no van a volver.
Nunca jamás se volverán a repetir.
Mi experiencia al no delegar
Como te he explicado en varias ocasiones, yo me perdí prácticamente la infancia de mis hijos y no hay cosa de la que más me arrepienta.
Todo por el trabajo.
Aquí es cuando llega el momento en que te planteas de delegar esas tareas productivas que tanto te gustan y empezar a vivir.
Porque ya te lo mereces.
Entonces mi pregunta es la siguiente:
Si todavía no estás en el otoño de tu vida: ¿Quieres esperar a que sea tarde y te tengas que arrepentir como yo?
Y si ya has llegado al otoño: ¿A qué esperas para cambiar esa situación que te mantiene esclavo de tu negocio?
Otro tema importante es el de la salud.
Cuando eres joven, como gozas de buena salud, no le haces ni caso, no la cuidas.
Las cosas no se valoran hasta que se pierden.
Pero cuando entras en el otoño de tu vida, te puede pasar como a mi este año.
Desde que monté mi empresa con 31 años de edad, no me había puesto enfermo ni una sola vez.
No había faltado de mi trabajo ni un solo día.
El año pasado en octubre me tuvieron que operar dos veces en un mes.
Tuve que estar tres meses de baja sin poder trabajar, aunque quisiera.
Empresa o Autoempleo
Cuando tu negocio depende de ti y no te puedes ausentar ni tres semanas porque tus ingresos caen en picado, estás en riesgo. Tienes un autoempleo.
Pero si tu negocio pudiera trabajar en piloto automático, sin necesidad de que tú estés en él necesariamente. ¿A que eso te daría mucha tranquilidad?
Cuando eres joven no te planteas todas estas cosas.
Cuando llegas al otoño de tu vida tus valores empiezan a cambiar y tus prioridades son otras.
No esperes a tener que arrepentirte.
Sistematizar tu negocio
Piensa en cómo puedes automatizar tu negocio para que no dependa de ti.
Empieza a delegar tareas productivas y céntrate en la estrategia de tu negocio.
Si no sabes cómo hacerlo, pide ayuda.
Tienes a tu alcance infinidad de medios.
Mentores, asesores, coachs, etc., que te pueden ayudar.
Puedes apalancarte en sus conocimientos y su experiencia para lanzar tu negocio a otro nivel.
Pensar que es imposible te limita, te cierra todas las posibilidades de conseguirlo.
Preguntarte: ¿Si otros lo han conseguido, cómo lo puedo hacer yo?
Te abre infinidad de posibilidades.
Ya sabes, te invito a reflexionar. ¡¡¡Piensa!!!
Comentarios ¡por favor!
Antes de despedirme quiero pedirte un par de cosas:
Problemas técnicos en mi web impedían que se pudieran poner comentarios en mis artículos.
¡¡¡Ya me extrañaba a mí de que nadie dejara comentarios y me los enviaran por e-mail o por Whatsapp!!!
Ahora que parece que ya se han solventado, te invito a que dejes tus comentarios al pie del artículo del blog.
Y a que lo compartas si te ha gustado, o crees que puede serle de utilidad a algún conocido.
Tienes botones para compartir en redes sociales o por correo electrónico al pie del artículo en el blog.
Muchas gracias y hasta la semana que viene.
Un abrazo.
Antonio J. Herrero García
Buenos días Antonio,
sabios videos….
en la época del otoño edad productiva hay de reflexionar tienes toda la razón.
seguimos en contacto
Josep Montañés
Gracias Josep.
Ya sabes, los que tenemos cierta edad podemos dar este tipo de consejos porque todo esto ya lo hemos vivido.
Gran mensaje Antonio…más claro…ni el agua…
o sistematizo…o me pierdo la mitad de la vida entre proyecto y proyecto.
Gracias por compartir
Noemí, por fin se puede comentar!!!
Exacto, con un Sistema tu empresa podrá funcionar ennpiloto automático y tú podrás dedicar el tiempo a lo que te plazca.
Buen fin de semana.
Gracias por comentar
Es para pensar en ello. Gracias Antonio
El tiempo pasa volando, si te despistas ya no hay marcha atrás!!!
Gracias por el mensaje Sònia