Historias inspiradoras. Oriol Penas
Te dejo el vídeo con la primera de las historias inspiradoras:
Su historia inspiradora:
Yo creo que ser emprendedor se lleva dentro, pero llega un día en que te das cuenta de que realmente lo eres, no es que no seas feliz con tu vida y con lo que haces, es que te falta algo, tienes un vacío y al final te das cuenta de lo que es.
Mi historia empezó como tantas otras, en una oficina, 9 horas viendo que las cosas se pueden hacer de otra manera y un día tras otro te das cuenta de que no quieres eso, luego la forma de salir de la zona de confort es diferente para cada persona, puede ser de forma voluntaria o involuntaria con una patada hacia delante que la vida te da.
En mi caso fue rechazando una oferta de cambio de posición, me llevaron a un despacho y en cuanto crucé esa puerta tuve claro que me ofrecieran lo que me ofrecieran, incluso si me tenía que ir sin nada eran mis últimos minutos en esa empresa y que jamás volvería a mi silla.
Mientras me contaban el discurso, yo ya no estaba allí, mi mente estaba poniendo en marcha lo que había diseñado durante años.
Al día siguiente estaba en un curso de emprendedores, quería empezar a respirar el ambiente cuanto antes, formarme, hacer networking, contactos, meterme de lleno en el mundo emprendedor.
Me formé en 3 áreas básicas en Barcelona Activa, tecnología con cursos para aprender nuevas metodologías de diseño web, en psicología realizando talleres para reforzar mi fuerza interior y conocerme mejor, y cursos de emprendimiento para conocer experiencias y adquirir conocimientos en todo lo que rodea al mundo emprendedor.
Yo tenía claro que quería lanzar una start-up de programación de páginas web y aplicaciones móviles, y quería formar en tecnología.
El proyecto estaba decidido y trazado, porque para emprender tienes que hacer algo que te guste, que te apasione y, en mi caso, 15 años de trabajando de informático me hacían experto en tres de mis pasiones, diseño web, programación y dar formación.
A partir de aquí sesiones de coaching, cursos de emprendimiento, conferencias, networkings, ferias como el Biz Barcelona y el sueño cada vez tomaba más forma, porque en la vida pasa algo mágico y es que cuándo giras un engranaje, las demás piezas se ponen en marcha y no hay vuelta atrás, como cuando Indiana Jones tocaba una piedra y se montaba un lio monumental en cadena.
Cada giro, cada movimiento, te lleva a una cosa nueva, a un conocimiento, a algo para hacer, una feria a una persona, esa persona a un taller, ese taller a un proyecto y sin darte cuenta estás en una noria fantástica en la que vives con incertidumbre, pero mucho más feliz, al menos en mi caso.
Ya llevo dos años con mi empresa, no tengo trabajadores, me formo continuamente, dos cursos-taller al mes, asisto a ferias, a webinars, dedico una hora al día a leer sobre emprendimiento y trabajo unas 6 horas más al día que antes, unas 13 horas que se pasan volando en mi rincón del centro de coworkig donde llevo más de un año.
Me gestiono el tiempo, salgo al patio que tenemos, miro al sol, recargo pilas y vuelvo. Yo decido mi camino, porque mi empresa es Ultreia Projects, y Ultreia es una palabra del camino de Santiago que significa adelante y yo ya no miro atrás, ya no miro a los lados, sigo adelante, porque el peor fracaso es un no intentar hacer las cosas, luego saldrán mejor o peor, pero no soporto la idea de no intentar alguna cosa.
Emprender va de felicidad, va de hacer lo que uno siente y de ser responsable de tu camino, de tus éxitos y de tus fracasos y va de aprender, es un master de vida, aprendes contabilidad, finanzas, a ser comercial, a gestionarte el dinero, a gestionar el tiempo, porque al final hagas lo que hagas, repercute en ti.
Yo llego a las 7 de la mañana al coworking y mis primeros minutos son el ritual del café viendo como el sol va saliendo, con la música de la película “el ultimo mohicano” de fondo y os aseguro que es un subidón de adrenalina que me dura todo el día…
Dime, o mejor dicho piensa una cosa para ti mismo, nadie la sabrá, cuando juegas a la Play Station a un juego de coches y puede elegir marchas automáticas o manuales, o cuando juegas al Fifa y te da la opción de que la consola controle algunos movimientos, ¿tu qué haces? ¿Dejas que la consola lo haga por ti? ¿O dices venga a lo guapo que hemos venido a jugar? Si no dejas que una consola controle lo que quieres hacer, ¿porque dejas que alguien controle tu vida entera? ¿No es más divertido llevar tu el control de tus centros? ¿De tus marchas? Te digo una cosa, si no trabajas para realizar tus sueños, trabajarás para realizar los de otro, tu mismo, yo ya he perdido bastante vida, no regalo ni un segundo más.
Por mi parte des de hace unos meses ya tengo centros fijos en los que doy formación, cada mes salen más presupuestos y poco a poco va tomando más forma la empresa, incluso me han dado un espacio en una radio para contar mi experiencia como emprendedor en el que cada semana dedico un tiempo a ayudar a otros emprendedores.
Déjate de cuentos, lleva tu sueño a la realidad, te aseguro que no te arrepentirás.
Su respuesta:
En Barcelona Activa siempre realizo formación gratuita, y no utilicé su servicio de ayuda a los emprendedores, ya que yo soy de Terrassa y aquí también hay incubadoras, de manera que no me tuve que desplazar para todo el tema del plan de empresa.
De todas formas, lo que tengo, lo he conseguido solo, los servicios del ayuntamiento en tema de asesoramiento son bastante limitados.
Y, como la gente que me dices, no fue ningún servicio de Barcelona Activa, ni del ayuntamiento el que me impulso a emprender, te dan teoría, te explican cosas, pero en mi caso hasta cierto límite, tienes que ser tú el que se lance.
De hecho, creo que hacer cursos es una excusa para no empezar, piensas, “venga un curso de contabilidad y ya empiezo” y otro, y un posgrado, y un master…excusas para no empezar.
En definitiva, Barcelona Activa o servicios de ayuntamiento están bien, pero es teoría, si quieres sacar tu empresa adelante hay que meterse en el barro a aplicar lo que te han enseñado, que al final es un 1 %, el resto lo aprendes a tortas diarias.
En el tema de ser padre, yo tengo una filosofía en la vida, y es girar las cosas a mi favor, por tanto, lo que para alguien sería una dificultad (tener que dedicar más horas a un recién nacido) para mi es una oportunidad, oportunidad de desconectar a ratos, oportunidad de luchar más para que mi empresa tire adelante por y para ella, oportunidad de trabajar a su lado mientras se duerme en lugar de perder el tiempo viendo la tele o acostándome pronto, así que para mí (quizá porque mi hija es una pasada) es una oportunidad de ser mejor y de hacer las cosas mejores, y si algún día me costaba realizar la llamada para cobrar una factura, ahora pensando que si no lo hago le perjudico a ella, ni dudo en llamar.
Y tienes razón con el autoempleo, de hecho, cuido mucho los proyectos para los que trabajo, hay cosas sagradas como bañar a mi hija o salir con ella el fin de semana que son innegociables, y, cuando vaya al colegio, quiero recogerla cada tarde, al final uno no se hace emprendedor para hacerse rico, si no para ser feliz, y a mi trabajar así me da la felicidad de trabajar en lo que me apasiona y de estar con la gente que quiero.
Oriol Penas
¿Y tú qué opinas?